¿Qué es la Salvación?
La salvación se trata de ser rescatado de lo que puede lastimar o destruir. Cuando alguien está en peligro y es rescatado, o está sufriendo y recibe alivio, se dice que ha sido salvado. Pero la salvación Cristiana se refiere a mucho más. Es la victoria en Jesús, salud espiritual, y el regalo de la vida eterna. El guardia Filipense quien fue a Pablo queriendo saber como recibir la salvación estaba preguntando de su destino eterno (Hechos 16:30-31). Pablo instruyó al hombre de la salvación eterna.
Uno se podría preguntar de qué somos salvados? Ante todo, somos salvados de la ira de Dios contra el pecado que seguramente caerá sobre pecadores si no son salvados de ella. Somos pecadores por naturaleza y por nuestra elección – por el pecado que heredamos de Adán y pecados que cometimos a causa de nuestra naturaleza caída, la consecuencia es una muerte espiritual (Romanos 6:23). Específicamente, la salvación es ser salvado de la ira de Dios contra el pecado (Romanos 5:9; 1 Tesalonicenses 5:9).
Pero nosotros no podemos salvarnos. Solo Dios quien creó la humanidad puede salvar a la humanidad rebelde y pecaminosa y ha proporcionado para nosotros un camino de salvación. Somos salvados solamente mediante la fe en Jesús por la gracia y poder increíble de Dios (Efesios 2:8; 2 Timoteo 1:9; Tito 3:5). Dios nos salva al darnos la única manera de salvación, la muerte de su único Hijo, Jesús, sobre la cruz y Su resurrección de entre los muertos (Romanos 5:10). Porque murió por nosotros y vuelve a vivir, así podemos morir físicamente y posteriormente vivir eternamente con Él. No merecemos la salvación. La salvación es un regalo de Dios (Efesios 2:5,8) que viene a nosotros solamente mediante nuestro Señor Jesucristo (Hechos 4:12).
Recibimos la salvación por medio del regalo que Dios nos da, que es la fe (Efesios 2:8-9), al oír “las buenas noticias” del evangelio de la salvación (Efesios 1:13) y creer en él. Pero la salvación es más que solo decir “yo creo.” La salvación requiere arrepentirse y arrepentirse es más que solo decir “perdón.” Arrepentirse es girarse a 90 grados contra el pecado; es decir, irse en la dirección opuesta, olvidarse de las atracciones del mundo y seguir las enseñanzas de Jesús nuestro Salvador (Mateo 6:24).
La salvación se define como ser liberado o rescatado por medio de la gracia de Dios, del pecado y su consecuencia del castigo eterno y ser levantado a una vida nueva con Cristo Jesús (Romanos 6:4). La salvación llega a aquellos que se arrepienten y mediante la fe, reciben a Jesús como su Salvador personal y Señor (Juan 1:12).